El Amor de DIOS:
Un Refugio Eterno
6/15/2024
Hola amigos de Semilla de Shalom!! hoy queremos recordar con ustedes algo fundamental: el amor incondicional de Dios.
El amor de Dios no depende de nuestras acciones, méritos o logros. Es constante y eterno, presente en cada uno de nosotros desde el principio hasta el final. Este amor no conoce barreras ni límites; es un amor que se extiende a todos, sin importar nuestras faltas o errores.
En las Escrituras, Juan 3:16 nos dice: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda, mas tenga vida eterna." Este amor nos abraza en nuestros momentos de alegría y nos sostiene en tiempos de dificultad.
No importa cuán lejos nos sintamos de Dios, su amor está siempre ahí, esperando a que volvamos a Él. Romanos 8:38-39 nos recuerda que nada puede separarnos del amor de Dios: "Porque estoy convencido de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni lo presente, ni lo por venir, ni poderes, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios."
Este es el amor que nos da esperanza, fuerza y consuelo. Es el amor que nos llama a vivir con bondad, compasión y misericordia hacia los demás. Porque así como Dios nos ama incondicionalmente, también somos llamados a amar a los otros sin condiciones, reflejando su Amor en nuestras acciones y en nuestras vidas.
Hoy, les invitamos a abrir sus corazones a este amor incondicional. Permitamos que el amor de Dios nos transforme y nos guíe. Vivamos cada día con la certeza de que somos amados más allá de toda medida y este amor está siempre con ustedes.
