Integrando Fe y Conocimiento
6/1/2024
Hola amigos de Semilla de Shalom!!, hoy queremos reflexionar con ustedes sobre la integración del conocimiento secular y la fe.
Queremos recordar que Nuestro Padre no está limitado únicamente a lo que entendemos de manera individual de las Escrituras, sino que Él se manifiesta en todas partes, de nuestra interpretación de los textos sagrados.
La creación misma es un reflejo de su inmensa sabiduría y amor. Romanos 1:20 afirma: "Por siempre, desde la creación del universo, Sus cualidades invisibles, tanto Su eterno poder como Su naturaleza Divina han sido vistas claramente, porque pueden ser comprendidas por todo lo que ha hecho". Dios puede estar donde sea que lo busquemos.
Nuestra predisposición a encontrarlo es la clave. Él, en Su amor, se muestra a nosotros tal como nosotros podemos y queremos recibirlo. Jeremías 29:13 nos dice: "Cuando ustedes me busquen, ustedes me encontrarán, con tal que me busquen de corazón".
Es importante reconocer que el conocimiento puede tener diferentes efectos en cada persona. Para algunos, estos conocimientos nos revelan los misterios de la creación de Dios y fortalecen la fe. Para otros, pueden plantearnos dudas y desafíos. Cada uno de nosotros debe discernir y buscar cómo estos conocimientos impactan nuestra relación con Dios.
Recuerden que la ciencia no necesariamente contradice a Dios: a menudo, revela la complejidad y belleza de su obra. Nuestro cerebro, esa obra magnífica de Dios, está diseñado para seguir aprendiendo y creciendo día a día. Nunca es tarde para aprender algo nuevo.
Así como ejercitamos nuestro cuerpo, debemos ejercitar nuestra mente, llenándola de nuevos conocimientos que nos permitan adorar a Dios con mayor profundidad y entendimiento.
Recuerden las palabras en Juan 4:24: "Dios es espíritu y quienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad." Adorar en verdad significa conocer a Dios, utilizando todas las herramientas que Él nos ha dado, incluida la mente que sigue creciendo y aprendiendo.
Hoy los invitamos a buscar la sabiduría en todas partes, a no temer aprender algo nuevo, a explorar con una mente abierta y un corazón dispuesto. Que cada nuevo conocimiento nos lleve a una mayor adoración y amor por nuestro Creador.
