Más Allá de las Relaciones Paternales
Sanando para fuir
4/13/2024


Hola amigos de Semilla de Shalom!! hoy queremos recordar con ustedes que nuestra percepción de Dios está influenciada por las relaciones que mantenemos en nuestra vida, especialmente con nuestras figuras paternas.
En muchos casos, sin siquiera darnos cuenta, proyectamos las experiencias y emociones de nuestras relaciones hacia nuestra comprensión de Dios.
La Palabra nos presenta a Dios como un Padre amoroso, compasivo y siempre presente. En Mateo 7:9-11: "¿Hay alguien aquí, que si su hijo le pide un pan, le dará una piedra? O si pide un pescado, ¿le dará una serpiente?, Si ustedes, aun siendo malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡Cuánto más su Padre que está en los cielos dará cosas buenas a los que le pidan!".
Esta imagen de un padre que desea lo mejor para sus hijos es una invitación a reflexionar sobre nuestra relación con nuestro Padre Celestial. Sin embargo, nuestras experiencias terrenales pueden nublar esta percepción.
La ausencia, el abandono, o incluso las relaciones conflictivas con nuestros padres terrenales, pueden hacernos ver a Dios como distante o indiferente. Pero, amigos, les aseguramos que Dios no es un reflejo de nuestras experiencias humanas. Él trasciende nuestras heridas y espera curarlas.
En la parábola del hijo pródigo, en Lucas 15:11-32, vemos la figura de un padre que, a pesar del abandono y los errores de su hijo, lo espera con brazos abiertos, dispuesto a perdonar y celebrar su regreso.
Esta historia es un poderoso recordatorio de que, sin importar nuestras fallas o distancias, nuestro Padre Celestial está siempre para recibirnos con amor y misericordia.
Así que, los invitamos a reflexionar sobre sus propias relaciones paternales. Reconozcan cómo estas pueden haber afectado su relación con Dios. Si hay heridas, acudan a Él para sanarlas. Si hay distancia, den el primer paso hacia su amor incondicional.
Recuerden, la relación con nuestro Padre Celestial no está condicionada por las imperfecciones humanas. Él nos conoce, nos ama, y nos espera siempre.
Queremos invitarlos a que, en esta semana, dediquen un momento para dialogar con Dios sobre su relación con Él. Pregúntense cómo sus relaciones terrenales han influenciado su percepción de Dios y pidan su guía para sanar cualquier herida que pueda estar interfiriendo en su conexión con Él. En la oración encontrarán el camino hacia una relación más profunda y verdadera con nuestro Padre Celestial.
